Al parecer, estos días lluviosos han puesto sobre Barrancabermeja una cortina de nubes que no permiten que la luz del sol ilumine al Gobierno nacional para que vea lo que está pasando en la ciudad de Barrancabermeja. Aunque el presidente Petro estuvo aquí, se sigue hablando de lo que será sin prestarle atención a lo que ha venido siendo.
A su llegada a Barrancabermeja muchos ciudadanos fueron apartados como ovejas negras que podían entorpecer el show mediático que se montó alrededor de la venida del que llamaban ‘el guerrillero ese’ y ahora le dicen ‘Señor Presidente’.
Por eso y ante tanta cosa:
Que alguien le diga al Petro que los votos que sacó en Barrancabermeja son genuinos, libres y no se los debe a nadie. Que si se los están cobrando que avise para desmentir.
Que alguien le diga al Petro que la ciudad está fragmentada y rota. Que no vaya a tomar partido con un bando, sino que más bien funja como mediador. Que le digan, que la gente no ve en quien confiar, no ve esperanza.
Que alguien le diga a Petro que el Distrito Especial, Portuario, Industrial, Turístico y Biodiverso, se está quedando sin biodiversidad por la contaminación. No tiene un puerto decente, no hay inversión para el turismo y la industria no se desarrolla.
Que alguien le diga a Petro que más allá del puente donde hay corregimientos y veredas, aún no llega el gobierno con agua potable y alcantarillado. Que las escuelas rurales se están cayendo a pedazos, que allí la institucionalidad no funciona, no existe.
Que alguien le diga a Petro que las bolsas de dinero están listas para comprar almas nubladas por el hambre. Un hambre estratégicamente generada para perpetuar el poder que con lo que roba paga a grandes equipos de comunicación para lograr blanquear sepulcros de gente sin alma.
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Que alguien le diga a Petro que a los jóvenes de la ciudad los están matando y a los otros los están comprando. Que no pudieron estudiar lo que querían como se les prometió. Que alguien le diga que esperamos que la impunidad no se siga robando la esperanza de los ciudadanos que anhelamos vivir en paz.
Que alguien le diga a Petro que las instituciones encargadas de supervisar el empleo no están funcionando desde hace mucho, que aquí con lista en mano juegan con las necesidades. Que cientos de personas se quedaron esperándolo a las afueras del coliseo de la juventud en Barrancabermeja.
Que alguien le diga a Petro que en octubre, muchos se están disfrazando de izquierda y que con la derecha se roban lo poco o mucho del hospital ese que se sueña algún día sea decente y no tengan que ir uno hasta Bucaramanga y pagar peajes.
Que alguien le diga a Petro que hay que construir sobre lo construido. Que en cuanto a la transición energética, antes de cancelar el plan A debe estar funcionando el plan B, diversificando la economía.
Que alguien le diga a Petro que estamos esperando el seguimiento a la Ptar, el parque del agua, la carretera de Barrancabermeja a San Vicente y demás obras que requiere la ciudad con urgencia.
Finalmente, ¿De qué más se tiene que enterar Petro? Usted qué opina.
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