Los policías estaban extorsionando a un comerciante de ese municipio ubicado al sur de Bogotá. La víctima del delito procedió a denunciar lo ocurrido ante el Gaula. Posteriormente, se tendió una trampa para agarrar a los policías con las manos en la masa. Los uniformados pedían dos millones de pesos al comerciante.
A pesar de que la familia logró reunir un millón, la víctima fue llevada de manera ilegal a una estación de Policía, donde permaneció retenida durante al menos dos horas. Luego fue liberado con la condición de entregar 500.000 pesos semanalmente.
El día de la entrega, el Gaula llegó y agarró a los uniformados con las manos encima del dinero que le estaban sacando al comerciante. Al verse atrapados, los policías solamente vieron una salida: comenzaron a tragarse el dinero. Sin embargo, tuvo dificultades y requirió asistencia médica para remover el dinero atascado en su garganta.
Por esto, los dos uniformados fueron llevados hasta un centro médico. Allí se esperaba que se mejoraran y que, si era posible, se pudiera recuperar el dinero luego de que ellos hicieran la digestión del mismo.
El director de la Fiscalía de Cundinamarca, Carlos Manuel Silva, relató cómo sucedieron los hechos que la captura de los oficiales fue grabada, y que el video evidencia el momento en que uno de ellos intenta tragarse el dinero:
“Tenemos algunos registros, estos registros son obtenidos de las cámaras del establecimiento de comercio y en algunos otros puede ocurrir que las autoridades cuando se realizan los procedimientos de captura para transparencia y legalidad del procedimiento, se hace esta filmación.”
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