Vamos a ponernos serios, el agua está mal, contaminada, con metales pesados, no podemos pretender tapar el sol con un dedo y no nos podemos hacer los de la vista gorda ante el hecho.
El estudio realizado por la Universidad Pontificia Bolivariana revela los niveles de mercurio que tiene el agua en la ciénaga San Silvestre, algo que el gobierno municipal trata de ocultar diciendo que la calidad del agua es “aceptable”. Entonces, ¿tenemos que esperar a que el agua este totalmente contaminada para que ahí si haya una intervención?
El alcalde Darío Echeverri se escuda en el hecho de que tenemos una fuente de agua que tiene problemas, en la cual desde hace 30 años aparecen metales pesados en algunos puntos, pero defiende la calidad del tratamiento que se le hace al agua.
El dilema de todo esto es intervenir la ciénaga San silvestre, es la única fuente de agua que tenemos en Barrancabermeja y la estamos perdiendo, los lixiviados de los rellenos sanitarios que cerca caen en sus cauces y eso se ve reflejado en la mortandad de peces y de manatíes, no podemos permitir que esto siga creciendo y que en unos años la contaminación de este afluente sea como la ciénaga Miramar.
Debemos ayudar a evitar las fuentes de contaminación que afectan el agua. Una posible solución a todo este dilema principalmente sería buscar un tratamiento para los lixiviados que destilan los rellenos sanitarios cerca al afluente, que con ayuda de la PTAR se puedan tratar todos estos líquidos para que causen un impacto menor si en dado caso entran en contacto con el agua de la ciénaga.
L. Medina
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