Actualmente el mundo está enfrentando una difícil situación debido a la pandemia del COVID-19, que ha dejado muchos fallecidos. Por esta razón, la atención de la sociedad, ha recaído sobre los acontecimientos entorno al virus.
No obstante, además de la pandemia, existe un tema que según los Derechos Humanos (DDHH) y el Derecho Internacional Humano (DIH), es preocupante. El asesinato de líderes sociales en Colombia se ha ido incrementando con el paso del tiempo, y uno de sus principales focos es la región del Magdalena Medio.
Así lo indican los datos expuestos en el ultimo informe DDHH-DIH Magdalena Medio (2018-2020), elaborado por el Observatorio de Paz Integral del Magdalena Medio (OPI). En el documento mencionado, se dan a conocer los hechos detallados de las violaciones a los derechos humanos en la región, desde el 2018 hasta el 2020.
Año 2018:
De acuerdo con el informe, el OPI registró 301 hechos violatorios de los DDHH en el 2018, con reportes de: 101 amenazas, la mayoría de muerte; 90 muertes violentas, donde 67 se desconoce el asesino; 15 secuestros, todos por parte del ELN y 23 acciones bélicas, como combates, ataques a objetivos militares y bloqueo de vías.
Año 2019:
En este año, el OPI registró 410 hechos violatorios de los DDHH, con los siguientes reportes: 167 amenazas, en las que 84 de ellas fueron de muerte; 145 muertes violentas, de las que 132 se desconoce su asesino y la mayoría cometidos con arma de fuego; 30 desplazamientos forzados masivos, por amenazas del ELN y 12 acciones bélicas, donde las principales fueron combates, campos minados y ataque a objetivos militares.
Año 2020:
En el presente año, hasta el 30 de abril, se registraron 103 hechos violatorios de los DDHH, donde se han reportado: 50 amenazas, la mayoría de muerte y en el distrito Barrancabermeja; 32 muertes violentas, de las que 31 se desconoce su asesino; 6 acciones bélicas, principalmente combates y campos minados.
A pesar de las diversas propuestas hechas por lideres sociales, organizaciones campesinas y líderes de acción comunal, para la transformación regional. Estos crímenes y la muerte de estos líderes, no han parado.
Y aún se está luchando para que la muerte de estas personas dedicadas a la transformación social y el desarrollo de la región, no quede impune. Que estos crímenes sean investigados por la Fiscalía General y se adelante una reparación por los daños causados.
Estos son algunos de los lideres asesinados: Belisario Arciniegas, Wilmar Carvajalino, José Antonio Medina, Carlota Salinas, Félix Castañeda, Víctor Barragán Martínez y Alberto Santos.