La pequeña Alondra, de Monterrey (México), sufrió una muerte cerebral al año y 7 meses de nacida. Esto ocurrió luego de que se le complicara una neumonía.
Para que la muerte de la menor no fuera en vano, sus padres decidieron donar los 2 riñones y el hígado de Alondra, ya que de esta manera podrían salvar a 3 bebés. Jenni Barraza, madre de la niña, contó a través de Facebook que, al momento de dirigirse al quirófano, médicos y enfermeras del hospital formaron una calle de honor para decirle adiós a su bebé.
Según su relato, todos se despidieron de Alondra “en silencio, con las manos juntas en señal de agradecimiento y visiblemente conmovidos”. Aunque a Jenni la invadió una tristeza indescriptible mientras se dirigía al quirófano, al ver el homenaje que el personal médico le hizo a su hija, ella caminó “orgullosa” y “con la cabeza en alto”.
La mujer añadió que a pesar de que su hija murió, tiene “el grandísimo consuelo de haber ayudado a salvar a 3 bebés”. Sobre esto, ella también compartió un mensaje al mundo para promover la donación de órganos:
“Me encargaré en lo posible de que este testimonio pueda salvar más vidas. Una persona con muerte cerebral no puede irse directo al panteón. Hay familias sufriendo, hay madres en la agonía a la espera de un milagro, de una oportunidad”.
Al final, Jenni les agradeció a todas las personas que estuvieron pendientes de ella y su familia, y manifestó que “fue un honor y un privilegio” haber sido la mamá de Alondra.
A continuación puedes ver el video del homenaje: