Se ha escuchado por todos los medios de comunicación sobre el próximo Festival Nacional de Cultura Urbana en su versión #6 que se realizará en la ciudad de Barrancabermeja los días 28, 29 y 30 de septiembre. Pero, ¿saben ustedes quiénes son los que han hecho esto posible?
Se trata de Darwin Ruiz, un joven de 27 años y Shirly Licona de 32 años, dos personas apasionadas a la cultura, quienes desde el 2013 transforman mentes con arte, danza y cultura urbana por medio de su academia K.UP.
Le puede interesar: Sexto Festival Nacional De Cultura Urbana Se Realizará En Barrancabermeja
Esta pareja barranqueña, ha tenido su historia de superación personal y han enfrentado situaciones de las que hoy día pueden mirar atrás y decir que están logrando sus sueños.
Darwin es auxiliar contable, bailarín, coreógrafo, Consejero Territorial de Planeación en el sector de juventud, cargo en el que quedó escogido gracias a su carisma y liderazgo.
A pesar de que no creció con sus padres, le debe y le agradece a su abuela quien se hizo cargo de él. “Mi abuela fue mi mamá y mi papá, gracias a su educación me tiene donde estoy”.
Es el hermano mayor de 4 mujeres. En un momento de su vida, siendo aún menor de edad, respondía por ellas. A los 13 años tuvo que trabajar en la calle para poder ayudar a su mamá y hermanas. Vendió chicles, chance, dulces, papas. Por ese motivo perdió octavo grado y lo echaron del colegio.
Para continuar con su bachillerato, entró a un colegio donde el entorno era un poco difícil. Sin embargo, decidió no dejarse influenciar por las malas compañías, por el contrario, llegó a ser el personero de la institución, formándose como líder. Y dijo: “Hoy día siento que he aportado mi granito de arena para salvar el colegio y que esté como está ahora, uno de los 3 mejores colegios públicos de la ciudad por la gestión que hice cuando fui personero”.
Aunque en su momento sintió trauma por eso, no fue motivo para dejar de luchar por sus sueños.
El gusto por el baile inició desde el colegio participando en todas las representaciones culturales. Cuando se graduó empezó a estudiar en el SENA por un convenio que tenía la institución y así pudo terminar su tecnología.
Por 6 años ensayó con sus amigos afuera de su casa. “Fue duro porque nadie nos apoyaba, ni creían, se burlaban. Nunca me vi detrás de una oficina, siempre quise hacer arte y bailar”, mencionó Darwin. En ese tiempo estuvo rodeado de malas compañías, algunos de ellos están muy metidos en las drogas, otros ya murieron.
A sus 19 años fue presentador en un programa de televisión en la franja juvenil llamado “Rolling Tv”. Cuando el programa se acabó, él ya tenía pensado tener una fundación. Fue entonces, cuando en el 2012 llegó Shirly a su vida.
Shirly es odontóloga de la Santo Tomás de Bucaramanga. Se graduó del colegio las Bethlemitas de Barrancabermeja, es cristiana, cantante, fundadora y gestora de la academia y bailarina en proceso de formación de danza latina.
Y aunque siempre quiso ser odontóloga, también le gustaba lo artístico y quería hacer algo serio con el tema. Es por eso que junto con otros amigos crearon una academia llamada Urban Project.
Dicha academia un día hizo una convocatoria en donde se presentaron varios grupos de danza urbana, entre ellos el de Darwin que se llamaba “EK.R”
Tenían el mismo proyecto de crear una fundación aunque a primera vista no se llevaron bien. “Yo lo conocía por la tv, y me caía mal porque me parecía que era creído” dijo Shirly.
En el 2013 los socios con los que ella tenía su fundación se fueron del país, lo que unió y motivó a esta pareja a crear lo que conocemos hoy como Academia K.UP.
Empezaron haciendo eventos, participando en desfiles, y su reconocimiento se prolongó gracias a una contratación que les hicieron para un show en el Mundial de Fútbol de Salón femenino que se realizó en la ciudad.
Ya en el 2015 tuvieron la primera presentación con bailarines formados por su propia academia, y desde entonces no paran de brillar con sus shows.
Así las cosas, llegan a realizar festivales, y este año será la versión número 6 de cultura urbana en la ciudad. Empezaron con 75 participantes y el año pasado eran 680 personas. Este año se viene recargado y será otra experiencia en todas las metas que se van proponiendo.
Darwin y Shirly son esposos y tienen una hija de 5 años. Siguen llenos de grandes proyectos para seguir emprendiendo y darle más reconocimiento a Barrancabermeja. “No somos un grupo, somos una empresa cultural”
