En un acto de intolerancia, el subintendente, quien no estaba de servicio en ese momento, fue confrontado por tres individuos, entre ellos un sujeto conocido como Pedro el escamoso, identificado como Expedito Figueroa. Este hombre, acompañado de Javier Ramírez Ramírez y Shirley Anaya, inició una discusión que escaló rápidamente. Aunque una joven que acompañaba al subintendente intentó protegerlo colocándose como escudo humano, la situación se tornó trágica cuando Figueroa, en un descuido, apuñaló al uniformado en el pecho.
A pesar de los esfuerzos por evitar la tragedia, los atacantes huyeron del lugar dejando al subintendente gravemente herido. Aunque inicialmente parecía estar estable, el investigador de la Sijín falleció tras ser trasladado a un centro médico debido a la gravedad de la herida. Su muerte deja un profundo vacío en su familia y en la institución policial, donde era reconocido por su dedicación y compromiso.
Las autoridades actuaron rápidamente, logrando capturar a los tres responsables del ataque. En su poder se encontró el arma cortopunzante utilizada en el homicidio. De acuerdo con reportes de prensa, Pedro el escamoso, de 54 años, tenía antecedentes judiciales por violencia intrafamiliar, lo que agrava aún más su historial delictivo.
Este trágico suceso ha despertado un llamado a la reflexión sobre la intolerancia y la violencia en la sociedad. La comunidad de Floridablanca lamenta profundamente la pérdida de un servidor público que dio años de su vida a la seguridad de su país, y clama por justicia para que hechos como este no queden impunes.