Este lunes, Juan Carlos Góngora se declaró culpable del feminicidio de Marilyn Yulieth Rojas, una auxiliar de enfermería de 29 años, quien desapareció en diciembre del año pasado. El sujeto envolvió el cadáver en bolsas y lo tiró a un camión de basura, luego de decirle a los recolectores que era un perro muerto.
Pese a la extraña desaparición de la mujer, ella aparentemente se conectaba a sus redes sociales. Por ejemplo, en la última comunicación por WhatsApp que Marilyn sostuvo con su hermana, Johana Rojas, le dijo que “se quería dar un tiempo”.
La escritura de la enfermera llamó la atención de Johana, Escribió el mensaje con una gramática extraña…como si no fuera ella quien tuviera su celular”.
Un inesperado viaje, mensajes a la familia de su esposa y la sospechosa petición a recogedores de basura para que echaran al camión bolsas con un “perro muerto”, fueron algunas de las pruebas que permitieron completar el rompecabezas del caso de la desaparición de la enfermera Marilyn Yulieth Rojas en Bogotá, quien vivía en el barrio Florida Norte, de la localidad de Engativá.
Frente a eso, la Policía explicó a los medios de comunicación:
“El hombre habría tratado de ocultar la verdad engañando no solo a las autoridades, sobre su inocencia, sino también a la familia y a algunas amigas de la mujer, a quienes a través de las redes sociales les envió varios mensajes fingiendo ser ella y manifestando su intención de desaparecer”.
Pero fueron esos errores de ortografía de Góngora, su confusa declaración ante el Gaula y la extraña desaparición de él, a los pocos días, lo que despertaron sospechas entre familiares e investigadores, que comenzaron con las pesquisas.
Todas las pruebas indicaban que Góngora habría sido quien, en un intento por impedir que su mujer lo dejara, atentó contra la vida de Rojas. Luego de siete meses de investigación, el Gaula de Bogotá capturó a Juan Carlos Góngora, el hombre señalado del feminicidio de Marilyn Yulieth Rojas. El asesino fue hallado en La Dorada, en el departamento de Caldas, lugar donde se escondía de las autoridades.
En la audiencia de imputación de cargos aceptó el feminicidio y fue enviado a una cárcel.