La comunidad de Girón, en Santander, se encuentra consternada tras el trágico hallazgo del cuerpo sin vida de Kerly Cuevas, una niña venezolana de 8 años que había sido reportada como desaparecida. El incidente ocurrió en las primeras horas del pasado 1 de mayo, cuando se alertó sobre la desaparición de la menor, y horas después fue encontrada sin vida.
Según informes preliminares, imágenes de cámaras de seguridad captaron a la niña minutos antes de su desaparición en compañía de un hombre, quien resultó ser el propietario de la vivienda en la que la menor y su madre estaban viviendo en arriendo. Tras una rápida acción de la Sijín de la Policía Nacional, se logró ubicar y detener al sospechoso, quien fue conducido a la Fiscalía General de la Nación para esclarecer los hechos.
El cuerpo de la pequeña fue descubierto en una zona boscosa cerca de la Estación Metrolínea, incrementando la consternación y la indignación en todo el país. Este suceso ha conmocionado profundamente no solo a los familiares de la víctima, sino a toda la nación, que clama por justicia ante este crimen atroz.
Se espera que las autoridades actúen con celeridad y diligencia para esclarecer este lamentable suceso y que se haga justicia en memoria de Kerly Cuevas.
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