Un magistrado del Tribunal Superior de Bogotá ordenó la restitución de las tierras de Jacinto Villamizar*, un campesino que perdió su predio ubicado en zona rural del municipio de San Vicente de Chucurí, Santander.
La reparación será realizada a través de una compensación que tramitará el Fondo de la Unidad de Restitución de Tierras (URT) por un inmueble de iguales condiciones al que tenían en los años noventa; y por su no deseo de regresar al predio, debido a las secuelas que le dejó la violencia.
“Ya nos encontramos buscando la casita que queremos para vivir. Decidimos quedarnos en Lebrija, un municipio, cerca de Bucaramanga, porque es donde hemos estado los últimos años, unos hijos también viven ahí y es donde ya hemos hecho un arraigo”, aseguró Jacinto*.
Y es que su vida en el campo fue prospera. Adquirió su predio en 1989 donde construyó su vivienda. Paralelo a ello, trabajó con la comunidad y desarrolló actividades comerciales a través de una tienda de vivieres que montó; y creó una microempresa de procesamiento de yuca seca. Pero, por la presión del conflicto, debió vender su finca a bajo costo.
“Las Autodefensas, que hacían presencia en el lugar decían que yo, como era un líder, estaba auxiliado por la guerrilla; y lo que pasó es que como yo, además de mi predio tenía una tiendecita y ahí llegaba todo tipo de personas a abastecerse, uno no podía discriminar a nadie. Fuera de eso, mataron a un vecino mío y la persecución en contra mía fue permanente”, afirmó Jacinto*.
“El beneficiario escuchó por la radio que las personas que debieron abandonar sus fincas por la violencia serían reparadas por el Estado. Entonces se acercó a la URT en Barrancabermeja y pidió asesoría. Los colaboradores le ayudaron y lo apoyaron con la solicitud de su tierra. Y el resultado salta a la vista: un predio nuevo y mejores condiciones de vida. Esa es nuestra tarea: ayudar a los campesinos víctimas de la violencia”, indicó Álvaro Julián Parada. Director de la URT en el Magdalena Medio.
En la sentencia, el tribunal aclaró que al opositor del caso no le fue reconocida la buena fe exenta de culpa. Por lo tanto, la parcela reclamada quedará a disposición del Fondo de la URT, para ser utilizado en la reparación de otras víctimas.
* Nombres cambiados.