La moringa es una planta que contiene un alto nivel de antioxidantes, vitaminas, minerales y hierro. Es usada desde hace siglos, pero últimamente se ha vuelto muy popular, ya que se demostró su alto valor medicinal y nutricional.
Su árbol crece en climas tropicales y tanto su raíz como su corteza, tiene propiedades que favorece la salud del ser humano. La fitomedicina (uso de plantas o sustancias vegetales con fines medicinales) y la medicina Ayurveda (medicina tradicional que aporta remedios para alcanzar y mantener en optimas condiciones la salud y bienestar); consideran a la moringa esencial por sus múltiples aportes para la salud.
Cabe mencionar que en ningún caso se debe sustituir las medicinas prescritas por un profesional de la salud. Tampoco sustituir tratamientos tradicionales de la medicina,
Estos son sus principales beneficios:
Por su alto contenido de fibra y proteína, produce una sensación de saciedad que contribuye a controlar el apetito y perder peso. Los extractos de sus hojas y semillas tienen una alta capacidad antioxidante, para evitar infecciones.
Ayuda a disminuir los niveles de colesterol, y la larga previene los accidentes cardiovasculares. Combate los síntomas de los procesos alérgicos, ya que desinflama la mucosa del tronco respiratorio. La moringa ayuda en caso de alergias respiratorias, alergias por contaminantes y por intolerancias alimentarias; procesos asmáticos, rinitis, conjuntivitis, laringitis y bronquitis.
Limpia el organismo:
Sus hojas se usan como laxante y purgante en estreñimientos crónicos o severos. Además, alivian la inflamación de los riñones y las vías urinarias, previniendo la retención de líquidos y los edemas.
La moringa también elimina las toxinas de la orina, ya que tiene un efecto protector y desintoxicante sobre el riñón. Atenuando el daño generado por agentes tóxicos como los medicamentos. Por último, fortalece el sistema inmune, manteniendo las defensas altas para prevenir efectos de virus y bacterias en el organismo.
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