Es tradicional que en tiempos electorales candidatos al concejo se sumen a candidatos a la alcaldía, pero Daniel Solano, Candidato al concejo de Barrancabermeja por el partido Alianza Verde, número 8 en la lista, afirma que no respaldará ninguna candidatura a la alcaldía.
Según Daniel, si la función principal de un concejal es hacer control político a la ejecución de los recursos por parte del alcalde, ¿Cómo se puede garantizar a los ciudadanos que se hará control, si ya van aliados desde las campañas? A lo que añade, “si en un partido de fútbol uno de los equipos le da plata al árbitro ¿adivinen a favor de quién va a pitar?”.
En este momento histórico en el que la clase política de la ciudad ha perdido credibilidad tras el desempeño de los actuales concejales y la inhabilidad que tuvo el actual alcalde, la apuesta de Daniel suena con fuerza pues desde su campaña y con acciones le apuesta a recuperar la confianza de la ciudadanía. Es así como el candidato del partido Alianza Verde, número 8 afirma que “cambios extraordinarios requieren de medidas extraordinarias”.
Aunque muchos afirmarían que esto no es posible porque el Verde le ha dado el aval a un candidato a la alcaldía y Daniel debe apoyarlo, la ley 1475 de 2011 en su artículo 2 sobre “Prohibición de doble militancia”, no menciona nada al respecto de los aspirantes que decidan no apoyar a ningún candidato, al tiempo que estas decisiones ya se han puesto en práctica por varios dirigentes de partidos a nivel nacional como lo ocurrido en la pasada segunda vuelta presidencial.
Hechos como andar en bicicleta hablando con la ciudadanía, vender mermelada de piña y mora para financiar su campaña, hacer pedagogía política a través de redes sociales y ahora tomar la decisión de NO aliarse a ningún candidato a la alcaldía, convierten a la campaña de Daniel Solano en la apuesta más interesante que se haya visto en las últimas elecciones al concejo de la ciudad.