PA dos meses de las elecciones, las campañas a la Alcaldía siguen su evolución con lo que ello conlleva. Propuestas, ideas, planes de gobierno y la infaltable ‘guerra sucia’ que desdibuja el ejercicio democrático próximo. En los últimos años el espíritu de las redes sociales pasó de compartir con los amigos y familiares a un ‘campo de batalla’ donde cualquier cibernauta escribe o publica lo que se le ocurre sin medir las consecuencias atentado contra la honra y bienes de los que consideran sus enemigos, en este caso ‘enemigos políticos’.
Eso no es nuevo, hace varios años vemos que casi ningún candidato a cargos de elección popular se escapa de comentarios, memes, fotos, insultos, montajes y demás, propios de los ‘terroristas de las redes’ que la mayoría, escudados en perfiles falsos, lanzan sus ataques inmisericordemente. Otros tantos, pagados por campañas, se dedican a desprestigiar a sus adversarios. La guerra debe ser de propuestas, sueños, programas, gestiones y no de calumnias e injurias virtuales. El pacto de no agresión que se firmó se quedó solo en los candidatos a la Alcaldía y el mensaje no llegó a muchos de sus seguidores.
Ninguno de los actuales candidatos a la Alcaldía de Barrancabermeja, se ha escapado de los ataques sistemáticos, la mayoría desde perfiles falsos, pero la andanada de ataques en contra del candidato del Movimiento Significativo de Ciudadanos Cívicos al 100% Jonathan Stivel Vásquez Gómez, empieza a romper récords cual estreno de cine, muchos de ellos amparados en el libre y soberano derecho de opinar. Recuerden que es más fácil destruir que construir.
Todavía no entiendo ¿cuál es el miedo con el muchacho?, ¿por qué ese afán de sacarlo del camino democrático a zancadillas? Jonathan Vásquez tiene escasamente 28 años, es la segunda vez que se lanza a la Alcaldía de Barrancabermeja, ha tratado de hacer las cosas bien, es sangre nueva en la política, se ha preparado para ser alcalde, ha estudiado, conoce el Municipio, sus necesidades, su gente y lo más importante, tiene convicción y está seguro de ser un buen mandatario.
Los votos se ganan con trabajo, con propuestas, con soluciones, con voluntad y todo eso es lo que debe tener un buen candidato. Si lo quieren derrotar, que sea en las urnas y no en las redes. No acaben con las buenas intenciones de aquellos que quieren servir a los intereses de la comunidad; no acaben con la honra de la familia; no mancillen la imagen de sus amigos y allegados, hay que construir ciudad. Este Municipio necesita de todos para salir adelante, el próximo alcalde no puede solo.
Si Jonathan Vásquez puso nuevamente su nombre a consideración del electorado es porque no se amilana ante esas adversidades políticas, pero los ‘ataques sistemáticos’ son otra cosa. Bienvenida la crítica, pero con respeto y altura.
El candidato ganador será el alcalde de todos los barranqueños y no solo de quienes lo apoyaron, porque las soluciones a los problemas sociales benefician a la colectividad y no a unos pocos. Más bien, esa capacidad de destrucción que tienen algunos deberían ponerla al servicio de los intereses de Barrancabermeja.
En democracia cada ciudadano puede elegir libremente a quien va a apoyar y eso se debe respetar, eso forma parte del contexto social en que vivimos. Aquí no existen Mesías, existen hombres de carne y hueso que quieren servir. Por eso, todavía no entiendo ¿cuál es el miedo con el muchacho?
Post Data: Una encuesta bien hecha técnicamente por una empresa reconocida marca una tendencia en el momento. No todo es falso ni ilegítimo. Por ahora, las encuestas dicen que Jonathan Vásquez lidera la intención de voto para la Alcaldía de Barrancabermeja.
Por Ronald H. Serrano Gómez