José Ortega, párroco de la iglesia de Santa Teresita, en San Juan, Argentina, se vio envuelto en un escándalo luego de que un joven le tendiera una trampa.
Mediante un perfil de Facebook, un hombre denunció que un amigo había estado recibiendo mensajes de Ortega en altas horas de la noche, entonces decidió copiar el número del cura y agregarlo a WhatsApp.
Para lo anterior, creó “un personaje similar al de mi amigo: joven, delicado, con aires de pureza e inocencia de una tierna edad, pulcro, cuerpo delgado y atlético. El perfil ideal para quienes se forman en la ‘homoeroticidad’ de la belleza del mancebo griego”, escribió.
El texto el joven lo acompañó con 40 capturas de un chat de WhatsApp entre su personaje creado (‘Lisandro’) y el sacerdote.
En la conversación, el cura le dijo su nombre, su edad, su profesión, y hasta le mandó fotos de su cara, y en ropa interior, al joven.
“Estás buenísimo” o “estoy muy caliente”, son algunas de las frases que le escribió el religioso a ‘Lisandro’.
Al final del chat, el joven le rechazó un encuentro y le dijo a Ortega que los clérigos hipócritas le dan asco. “Me hiciste una trampa”, le respondió el cura.