La Gobernación de Santander ha puesto en marcha un censo en los municipios afectados por las intensas lluvias del pasado fin de semana. El objetivo es identificar a los damnificados y evaluar los daños en viviendas, vías, puentes y cultivos para brindarles la ayuda necesaria. La Unidad de Gestión del Riesgo de Santander ha desplegado funcionarios a municipios como Tona, Sabana de Torres, Piedecuesta, Girón, Rionegro, Barrancabermeja y San Vicente de Chucurí para realizar los censos y trazar un plan de atención.
En Barrancabermeja se registró una fuerte tormenta, acompaña de vientos que se llevaron rejas, árboles y dejaron vías inundadas. Esto en medio de la oscuridad tras un apagón que se registró por varias horas en los diferentes sectores de la ciudad.
Lluvias en Santander
En Tona, por ejemplo, más de 100 familias han sufrido afectaciones en sus cultivos y viviendas debido a las inundaciones. El acueducto también resultó dañado, dejando a la comunidad de Berlín sin agua potable. Además, dos puentes fueron arrastrados por el agua, lo que ha generado la necesidad de evaluar los daños y proporcionar asistencia a las familias afectadas.
En San Andrés, cerca de 1.700 personas se vieron afectadas por la caída del puente El Congreso. Esta situación ha dejado a la comunidad sin acceso a la cabecera municipal ni la posibilidad de trasladar sus cosechas para su comercialización. Los habitantes de la vereda El Caracol, donde se ubica el puente, han quedado nuevamente incomunicados; ya que este puente, reconstruido el año pasado tras una avalancha, fue arrasado nuevamente por el río.
El departamento de Santander enfrenta una situación crítica debido a las lluvias, con 70 de sus 87 municipios en alerta naranja y amarilla según el último reporte de la Oficina de Gestión del Riesgo y Desastres. Esta temporada de invierno está generando múltiples desafíos para las comunidades afectadas, pero las autoridades continúan trabajando para brindar apoyo y mitigar los impactos de estas emergencias naturales.
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