Un estudiante de una institución educativa de Bucaramanga denunció cómo en el recreo le ofrecen drogas y alucinógenos camuflados en brownies y palenas.
Preocupadas se encuentran las autoridades educativas ante esta denuncia; pues es alarmante que este tipo de hechos pasen en las instituciones educativas y que lleguen a los menores de edad.
La denuncia que hace el estudiante es que cuando llega la hora del recreo, varios jóvenes que no pertenecen a la institución, utilizan el uniforme de la misma para entrar y proceder al expendio de droga; hecho que llegó hasta el concejo de Bucaramanga, donde tienen la alarmas encendidas, pues no es el único colegio donde se presentan este tipo de casos.
“Son los mismos alumnos quienes ingresan brownies y paletas con marihuana, dosis de clonazepam y otras drogas en los forros de sus celulares, para luego venderlas a sus compañeros, pasando desapercibidos a la vista de maestros y directivas”, afirmó para Vanguardia el concejal de Bucaramanga Jaime Andrés Beltrán.
Se encontraron estupefacientes en los salones
En la institución se adelantan pesquisas en los diferentes salones, evidenciando así el ingreso y comercialización de estupefacientes en el colegio.
Según el concejal Beltrán, este material probatorio será entregado a la autoridad competente para que tome las medidas necesarias; y así acabar con este microtráfico en la institución educativa, así como puso al tanto al ICBF para que se apersone de la situación de los menores de edad.
“Los resultados de la investigación, que hicimos en diferentes colegios, son voces de alerta para la comunidad educativa de la ciudad, para las autoridades de infancia y adolescencia, pero especialmente para los padres, quienes ahora más que nunca deben estar atentos al cuidado y orientación de sus hijos, evitando que caigan en manos de personas sin escrúpulos, quienes los utilizan como medios para vender drogas y robustecer su negocio criminal”, reiteró a Vanguardia el concejal Beltrán.