De alta fue dada la bebé de 11 meses de nacida que el pasado jueves 22 de noviembre ingresó a un centro asistencial tras ingerir de manera accidental un tornillo de aproximadamente 5 centímetros.
Después de varias diligencias que hicieron los padres de la menor, quien no era intervenida porque su EPS al parecer no había pagado, gracias a la ayuda de la Personería y otras entidades fue trasladada este sábado 24 de noviembre hacia Valledupar donde lograron extraerle el objeto extraño que estaba en su cuerpo.
“Se llevó a Valledupar, allá los médicos la revisaron y se logró sacarle el tornillo de manera natural mediante una purga. Ya está mejor y toca en unos días llevarla al pediatra para saber cómo sigue evolucionando” manifestó la mamá de la bebé.
Los padres de la menor están a la espera de la mejoría de su bebé y cómo avanza en todo este procedimiento.
Es importante estar más pendiente de los niños para que situaciones como está no se repitan.