Decentenario nace en el seno de una colectividad civil, ciudadanos decentes que han aportado al territorio desde su rol profesional, social, organizacional y empresarial sin esperar nada a cambio.
Los primeros círculos de pensamiento, donde nace la apuesta, permitieron poder identificar la necesidad de abrir espacios para el establecimiento de un diálogo superior, de ciudad, una nueva forma de relacionamiento humano, donde prime el respeto de unos a otros como hijos de una misma tierra, y la búsqueda del espíritu que nos une e identifica como barranqueños.
Barrancabermeja Decentenario parte de saber de dónde venimos para construir el mañana, reconocer lo que somos y defender con ahínco lo que es de todos; La historia será fundamental para aprender lo bueno y dejar atrás lo malo, guardar las esperanzas de cambio, y, aportar como ciudadanos a lograr alcanzar la Barrancabermeja que soñamos y merecemos.
Este colectivo busca avanzar en una causa, Barrancabermeja. Por ello, elevar la conciencia de ciudad y visión de progreso de los habitantes será clave para acortar camino al desarrollo.
Para enmarcar el mensaje en un plano emocional y de conexión con la gente Kiara de la Ossa, cantadora quién le compone al rio y las riquezas que guarda la bella hija del sol, puso a disposición su creatividad e ingenio para componer una canción que nos identificará. Hoy en día, un sin número de barranqueños se unen a esta apuesta de ciudad, cobijados en la idea que, se pueden construir grandes cosas siempre que se tengan presentes los siguientes principios:
Amor por la ciudad y la Región: motivar la esperanza de amor por lo nuestro, nos convierte como corporación, en pioneros de una nueva forma de relacionarnos con el territorio, ciudadanos comprometidos con su desarrollo.
Respeto por las personas: Respetar por lo que somos, merecemos y soñamos hará que la vida en sociedad sea más fácil y llevadera; buscamos promover el respeto entre nosotros mismos para entender nuestras diferencias y trabajar en convergencia, el desarrollo territorial.
Decencia y educación a todo nivel: comprender que la decencia y la educación son un eje fundamental del de desarrollo; la decencia como un aspecto cultural y ciudadano, modelo que permita instaurar una nueva forma de aprender hacer cosas buenas por el territorio. Ciudadanos educados y decentes que pueden crear, innovar y transformar.
Conciencia ciudadana: invitar a la responsabilidad colectiva para hacer sentir que el territorio nos pertenece a todos y es una responsabilidad de todos; como la pirinola si todos ponen todos ganan.
Visión de progreso: establecer un nuevo chip de progreso en sentir, emoción y acción de los ciudadanos del territorio, que se sientan dueños de su riqueza, pero también generadores de la misma.
Poner de moda DECENTENARIO como ejercicio de reflexión y llamado a la acción ciudadana, permitirá trabajar en el propósito de construir, entre todos, el verdadero progreso, cobijados en la esperanza de transformar la bella hija del sol, tierra del chapapote, la cumbia y el son.