Decenas de jóvenes en el mundo están haciendo el reto de la Ballena Azul, una escalofriante lista de pruebas que pasan por cortes en las muñecas hasta saltar de un edificio muy alto. Terminando en un suicidio.
Más de 130 jóvenes en Rusia han muerto tras terminar la prueba. Autoridades en el continente están en alerta ya que el escalofriante reto ya llegó a Brasil, y ha dejado víctimas mortales.
El origen del juego no está claro pero surgió en Vkontakte, una especie de Facebook ruso, en la que varias noticias falsas al expandirse por las redes sociales acabaron convirtiéndolo en viral.
¿Cómo funciona?
El cumplimiento de los 50 desafíos es supervisado por unos “curadores”, adolescentes con perfiles falsos o personas que viven en otros países, sin ninguna relación con los participantes, y que mandan los mensajes con las pruebas a las 04:20 de la madrugada.
Entre los retos a ser superados hay algunos simples, como dibujar una ballena en un papel y otros más mórbidos, como cortar los labios, hacerse un agujero en la mano, tatuarse una ballena en el brazo con una lámina o pasar 24 horas sin dormir viendo películas de terror.
Los participantes deben mandar fotografías de que han cumplido con los retos a sus curadores e incluso, subirlas a redes sociales como prueba bajo las etiquetas #i_am_whale y #bluewhalechallenge (Al hacer la búsqueda en redes sociales puede encontrar material visual sensible).
Los adolescentes reciben mensajes en su teléfono o en perfiles de Facebook para unirse a grupos cerrados y poder participar en el juego.
Estos son algunos de los retos que plantea La Ballena Azul o el #BlueWhaleChallenge:
-Invocar espíritus.
-Ver videos violentos.
-Ver contenidos audiovisuales psicodélicos.
-Escuchar música aturdidora que les envían los creadores del ‘juego’, quienes se autodenominan “curadores”.
-Tomarse fotos ahorcándose.
-Y el último y más preocupante: lanzarse desde un piso alto, reto en el que muchos estarían perdiendo la vida.
En Latinoamérica
Los primeros casos fatales en Brasil fueron en el estado de Paraíba (noreste), donde al menos dos jóvenes fallecieron supuestamente mientras participaban en una de las pruebas del juego.
Posteriormente, se registró otra muerte de una chica de 16 años en Vila Rica, en el estado de Mato Grosso (centro-oeste del país), que murió ahogada en un lago y cuyo cuerpo fue encontrado con cortes en los brazos, una de las habituales pruebas que exige el juego.
“El último desafío es el suicidio. Si bien es cierto que un juego como tal no tiene la capacidad de que un niño tome la decisión de quitarse la vida, cuando un menor tiene un sistema emocional debilitado, que ha tenido antecedentes por depresión o conductas suicidas, puede ser demasiado vulnerable y estar en un alto riesgo si llega a encontrarse con un juego como estos en línea”, señaló la coordinadora de infancia y Tic de la RedPapaz, Viviana Quintero.
En Colombia aún no se han registrado casos relacionados con el juego, pero las autoridades están alerta ante cualquier situación.