Ferticol nace como un piloto de Ecopetrol constituida como una Sociedad Anónima “INDUSTRIA COLOMBIANA DE FERTILIZANTES” para producir, distribuir y vender productos petroquímicos, especialmente, abonos químicos y sus elementos.
La empresa inicia con un capital autorizado de 20.000.000 y el capital inicial era de 10.550.570
Su objeto era la obtención de abonos químicos producidos localmente que sirvieran de aporte razonable a la producción agrícola colombiana y como potencial del posconflicto.
La empresa fue creada por el estado colombiano a través de la Caja Agraria con un 49% de las acciones y Ecopetrol con un 26%, la Universidad Industrial de Santander (UIS) tenía un 16% y el 9% restante, correspondía a los accionistas minoritarios.
Mal manejo desde sus inicios
De acuerdo con la reseña de la empresa, desde sus inicios ha luchado contra el mal manejo administrativo y financiero, desencadenando varios intentos de liquidación.
En 1695 la empresa tuvo que suspender las actividades tras la situación económica debido a un grave daño en la Sección de Fraccionamiento del Área de la Planta de Amoniaco.
Es así como se ordena por primera vez su liquidación, no obstante, se logra llegar a acuerdos en 1966 a partir de la constitución de una sociedad de Fertilizantes Colombianos S.A – FERTICOL y es entonces, cuando para ese momento se firma contrato con Petroquímica del Atlántico S.A, Ecopetrol y Caja Agraria.
Acuerdos incumplidos
Posterior a los acuerdos y la constitución de la sociedad, para 1967 arranca la Planta de Amoníaco, a pesar de haber contratado mano de obra calificada, tuvo que replantearse lo establecido debido a las diferentes fallas de las compresoras de la nueva planta y en los suministros de los servicios auxiliares por parte de FERTICOL generando, al parecer, múltiples perjuicios a las compañías dejando sin suelo los proyectos.
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Entre los nuevos acuerdos, para 1971, el Banco de la República consideró la propuesta de FERTICOL para la refinanciación de las deudas adquiridas por Fertilizantes Colombianos S.A
Es hasta el 2003 que la empresa empieza a ir en declive, cuando es reestructurada a causa vacíos financieros y la empresa tuvo que parar por 18 meses.
Debate
Vanguardia invitó al gerente de la empresa, Juan Carlos Sierra Ayala; al Diputado, Mauricio Mejía y al Presidente del Sindicato Sintraferticol, Luis Cruzado
“No tienen contabilidad ni siquiera de los últimos 5 años y no hubo una contraloría, pero si le deben un auditaje a esta, no hubo una Fiscalía para el tema de los negocios prediales. Hubo unos gerentes que en dos o tres días lograron 70 conciliaciones con empleados, los cuales ni siquiera han recibido dineros, sino unos documentos que los llevaron a una inmobiliaria, entregando las propiedades de Ferticol para que finalmente quedara en manos de unos terceros”.
Mauricio Mejía diputado Asamblea de Santander
La empresa realizó 70 conciliaciones judiciales en la oficina del trabajo en Barrancabermeja, en diciembre, en un solo día ante el mismo funcionario para pagar las acreencias laborares que se debían a empleados y pensionados.
“Durante la administración de gerencia de Juan Carlos Sierra, del comité fiduciarios. Se paró sistemáticamente la planta, fueron 17 veces seguidas, un plan diseñado para que Ferticol se fuera degradando, el sindicato lo denunció: denunciamos los robos de los cables, denunciamos todas las anomalías ante los entes de control y la respuesta de las entidades de control, hasta el momento no sabemos nada. En Ferticol hay verdades a medias”
Luis Cruzado, presidente del sindicato
Puede ver aquí la entrevista de vanguardia
¿Quién es el culpable?
Así mismo, el gerente se refirió en ese momento sobre lo que aconteció entre los años 2016 – 2019 que no estuvo en la gerencia de la empresa:
“Yo entregue la empresa en marzo del 2016 funcionando, con la nómina al día, las plantas en línea, a doble capacidad de producción, 5 mil toneladas de producto en bodega; y ahora cuando la vuelvo a recibir, me encuentro con un muerto. Yo entregue una empresa funcionando y me devuelven un cadáver”.
Juan Carlos Sierra Ayala, gerente de Ferticol
Responsabiliza entonces a la junta directiva, a la asamblea de acreedores de la época, al comité de vigilancia de la época y a la asamblea de accionistas de la época ya que eran ellos, los órganos de control estaban para eso y no funcionaron, aseveró Juan Carlos Sierra.