La Organización Femenina Popular – OFP – conmemoró sus 44 años de lucha femenina y social con un evento que permitió la concentración de cientos de personas, organizaciones sociales, madres líderes de hogar y diferentes sectores que han emprendido el camino de la oposición ante la guerra y la violencia que se presenta en Barrancabermeja, Magdalena Medio y Colombia en general. Durante el encuentro se aprovechó para hacer el lanzamiento del libro Vidas de Historia, el cual cuenta las vivencias de 70 mujeres que han resistido la violencia para la construcción de paz.
Dígame tuvo la oportunidad de charlar con una mujer que ha vivido, como ella misma nos lo cuenta, en carne propia la violencia que le han valido cicatrices en el alma y el cuerpo, siendo su bandera frente a la violencia de género que desde hace 44 años buscan defender y erradicar.
Gloria Amparo Suárez comenta que la coyuntura del país permite vislumbrar lo que ellas, desde la organización, han venido trabajando desde el año 1996, cuando iniciaron con la construcción de la cadena de mujeres contra la guerra. “Desde aquella vez nuestra mensaje fue claro y conciso: Construcción y salidas negociadas para la guerra, realidades que estamos viviendo 20 años después”, precisó.
Según la funcionaria la articulación de los espacios, como el ofrecido recientemente por la misma organización, son muestras fehacientes de los resultados que tras varias décadas de lucha y resistencia a los actos violentos, por parte de grupos armados ilegales y legales, han protagonizado, causándoles huellas imborrables, quitándoles seres que jamás volverán o, sencillamente, recuerdos que el paso del tiempo jamás se llevará.
Durante el encuentro también se exaltó la realización de varios murales elaborados por algunas mujeres del comité de víctimas, grupos de apoyos y niños y niñas de las sedes de La Casa de la Mujer ubicadas en municipios del Magdalena Medio con el objetivo de exponer la vida y obra que la OFP ha logrado edificar durante sus 44 años de vida.
Gloria Suárez señaló que es preciso aprovechar el contexto histórico que atraviesa el país, relacionando que los acuerdos firmados en La Habana son un paso importante, no solo para la historia, también para silenciar los fusiles que por muchos años han acallado las voces e impedido escuchar lo que los colombianos tienen por decir entre sí y por comunicar a los demás.
“Hay que aprovechar este impulso no sólo para hallar una solución dialogada con los grupos armados, en este caso con la FARC, sino también con el ELN. Reconocemos que este no es un proceso completo, por el contrario vemos en él un paso gigante que permitirá a Colombia, y a la región del Magdalena Medio tan golpeada, reiniciar con la construcción de nuevos horizontes sociales, culturales, femeninos y demás”, comentó la líder.
El evento concluyó con un almuerzo entre los partícipes del acto, conversando sobre la línea matriz que direcciona a la Organización Femenina Popular: Seguridad alimentaria, tema álgido que según la OFP ha permitido al movimiento siempre procurar mantener una vinculación directa con las mujeres, vivientes o no esta situación, conociendo siempre de primera mano el contexto en el que se hayan las mujeres a lo largo y ancho del territorio.
“Este, por ejemplo, es una situación que simboliza la ausencia de la paz en muchos aspectos, es por esta razón que nuestra lucha es persistente y constante, buscando que la paz toque a todos y todas para que así se genere una construcción ideal de sociedad”, concluyó Gloria Suárez.