Un decreto expedido por el Ministerio de Hacienda reglamenta la destinación específica que tendrá el impuesto nacional al carbono en Colombia.
La determinación supone que el impuesto el carbono se destinará, mayoritariamente, a la paz y no al medio ambiente, como inicialmente estaba previsto. El Gobierno Nacional, a través de la Reforma Tributaria del año 2016, creó el impuesto nacional al carbono, cuya finalidad consistía en incentivar la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) al aplicarse sobre algunos combustibles fósiles.
“El setenta y cinco por ciento (75%) del recaudo del Impuesto Nacional al Carbono, se destinará a la Implementación del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto Armado y la Construcción de una Paz Estable y Duradera.” Dicta el Decreto.
Dicho decreto abría la posibilidad de que algunos actores de la cadena de distribución y uso, incluyendo distribuidores mayoristas de combustibles, pudieran certificar ser carbono neutros, es decir, que hayan compensado las emisiones producto del uso de los combustibles gravados por el impuesto.
“El veinticinco por ciento (25%) del recaudo total del Impuesto Nacional al Carbono se destinará al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible al cumplimiento de metas ambientales relacionadas con erosión costera, la reducción de la deforestación, la conservación de fuentes hídricas y la conservación de ecosistemas estratégicos, cambio climático y su respectivo monitoreo, reporte y verificación”