Se dedicaban al tráfico, comercialización y distribución de alucinógenos en Cimitarra y Landázuri. Según informaciones en proceso de verificación, estas personas instrumentalizaban menores de edad con el propósito de vender dosis en entornos escolares. Cada dosis tendría un valor aproximado de $10.000 lo que les generaba ganancias superiores a los $200 millones mensuales.
Este trabajo investigativo adelantado con funcionarios de la Seccional de Investigación Criminal SIJIN y por hombres de inteligencia del Ejército Nacional, en una operación denominada “Poseidón VII”, golpea de manera directa las finanzas, logística y estructura de la banda ‘los indios’, quienes distribuían todo tipo de estupefacientes con entregas a domicilio, billares, galleras y cerca de centros educativos donde al parecer inducían a los jóvenes al consumo de estas sustancias.
‘Los indios’ afectaban la tranquilidad de los habitantes de la provincia de Vélez con el tráfico local de estupefacientes. Este programa metodológico articulado con la Fiscalía General de la Nación, dio como resultado la captura de 33 personas por orden judicial y dos en flagrancia, en 35 diligencias de registro y allanamiento; desarticulando la totalidad de esta estructura delincuencial.
Semanalmente distribuían más de 5000 dosis en las calles de estos municipios. Las mujeres que integraban esta banda delincuencial ocultaban las dosis en sus partes íntimas para tratar de evadir el control de las autoridades.
Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía Segunda Seccional de Cimitarra, donde se inició en su contra un proceso penal por el delito de concierto para delinquir, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y destinación ilícita de muebles o inmuebles, donde todos fueron cobijados con medida de aseguramiento. En caso de ser hallados responsables, enfrentarían una pena entre los 128 y 360 meses de prisión.
